Domingo de ramos

Podría ser un test de esos… pero me faltan algunos detalles. Lo que tengo por ahora es esto:

Supongamos que ud. se encuentra en Jerusalén, el domingo anterior a la Pascua del año 30. Está entrando Jesús de Nazareth a la ciudad; mucha gente en las calles, entusiasmo y aclamaciones.
Supongamos que ud. ya conoce a Jesús, ya sabe quién es, y qué le va a pasar. Ud. sabe que los que hoy vitorean al «hijo de David», en pocos días lo rechazarán y harán matar; tal vez ese entusiasta que está frente suyo, agitando palmas, el viernes pedirá que liberen a Barrabás y escupirá sobre Cristo camino al calvario. Bien.
Pero el caso es que, aun sabiendo eso, hoy usted es un espectador más, es parte de ese pueblo de Jerusalén que recibe a Jesús de Nazareth.
¿Qué hace usted?

  1. Mira con veneración a Jesús y con severidad a los aclamadores. Esa alegría es cartón pintado -piensa-, no puedo participar de ella; esta gente no entiende la cruz, no tiene idea de lo que está viendo ni de lo que está vitoreando; ya van a ver lo que se viene…
  2. Piensa con dolor que ese recibimiento no es trigo limpio; trata de buscar la forma «correcta» de recibir a Jesús, de darle «realmente» la bienvenida; intenta aislarse del entusiasmo sospechoso de la multitud, para «conectarse» con Jesús y rendirle un homenaje más espiritual, menos rústico y más verdadero.
  3. No es tiempo de pensar en lo que se viene —piensa— es tiempo de aclamar a Jesús que está entrando a la ciudad. Se une, pues, a los vítores, y se alegra igual que todos y con todos. (Jesús incluido… es de esperar)
No sé usted, pero yo quisiera poder elegir la última, con seguridad. Pero no estoy seguro.

Ah… me preguntará usted para qué sirve el test, y qué clasificación determina la elección de las respuestas. Pero ya dije al principio que me faltaban ultimar algunos detalles…
# | hernan | 14-abril-2005