Y por otro lado, hace poco hablábamos de nuestra necesidad de encontrar un sentido al cosmos.
¿Tiene algo que ver, o se trata de una mera coincidencia verbal?
Yo hubiera tendido a responder lo segundo.
Pero después de leer esto de Kafka (y sin haberlo leído, probablemente no me habría planteado la pregunta), no estoy tan seguro:
La raíz de la palabra sensualidad es sentido. Eso tiene un significado muy concreto. El hombre sólo puede llegar a alcanzar el sentido a través de lo sensorial. Naturalmente, este camino también es arriesgado: se le puede dar prioridad al medio sobre el fin. Entonces se llega a la sensualidad, que es precisamente la que desvía nuestra atención del sentido.
La cita, notable (entre otras cosas, porque anticipa la salvedad y el peligro, que también expresara Marechal en «Ascenso y descenso por la Belleza»), la encontré en este blog ( notable, también) especializado en literatura infantil y juvenil.