Otros tradicionalismos – 3

Algunas observaciones y perplejidades adicionales:
  • Sabemos que la mayoría de los antiguos (griegos, por ejemplo; Aristóteles, por ejemplo) creían en la eternidad del mundo. Pero yo siempre había pensando esa teoría en términos «cosmológicos», no en términos humanos. Necesité esa referencia de Gilson a la tradición según Aristóteles para hacerme una idea: así, un tradicionalista que cree en la eternidad del mundo, cree en una trasmisión que se remonta al pasado infinitamente. Porque no sólo el mundo es eterno: también lo es el hombre.
    Me impresionó tomar conciencia de eso. Tan acostumbrados estamos a la cosmovisión lineal (y la evolución; y el progreso científico) que nos resulta difícil concebirlo: una humanidad eterna, siempre igual, culturas que pasan una atrás de la otra… traten de imaginarlo; da vértigo.

  • ¿Las últimas lineas de Gilson no vendrían a contradecir lo anterior? Si hace falta alguna noción previa de Dios para aprehender las demostraciones de su existencia, ¿cómo puede decir que «carece de importancia que la educación familiar o la enseñanza de las escuelas o de las iglesias transmita esta noción a los espíritus»?

  • Sospecho que estamos demasiado prontos a asentir a la primera hipótesis y a rechzar la segunda:
    …doble hipótesis: en primer lugar, que la certeza de la existencia de Dios es en gran medida independiente de las demostraciones filosóficas que de ella se dan; en segundo lugar, que el fracaso de tales pruebas para convencer a espíritus modernos no tiene que ver gran cosa con la difusión de la ciencia.
    … «demasiado» prontos, digo, porque sospecho que no entendemos bien ninguna de las dos.
  • # | hernan | 6-mayo-2006