No dire que lo prometido
es deuda, porque tendría que declararme en quiebra.
Pero, por una vez, cumplo con el «Elogio del fracaso» por Alejandro Dolina.
Lo encontré en un viejo recorte de la revista Humor.
Un poco menos de lo que creía recordar, pero bastante
más de lo que hoy uno puede encontrar por ahí… Unas cuantas
alusiones inteligibles sólo para argentinos, supongo (algún día
tendría que armar un glosario para lectores de afuera);
pero no creo que eso impida el módico disfrute de la prosa
dolinesca.
Un poco superficial, dirán; elogio poético pero desvaído, dirán.
Pero el tipo no es cristiano; qué quieren, diría él… es lo que hay.