…Como es fácil suponer, semejante artículo nos
dejó un poco sorprendidos, y nos creímos
en el derecho de negar su completa exactitud…
Lo cual, como bien dice acá, prefigura la famosa frase de Mark Twain.
Los rumores sobre mi muerte…
Lo cuenta el padre Huc en la penúltima página de su «Viaje por
la China». Los misioneros habían llegado
por fin a Cantón y pidieron al cónsul francés
periódicos de Europa (llevaban más de tres años sin noticias). Y
se toparon con la noticia de su martirio.
Un artículo relataba con lujo de detalles cómo los
misioneros habían sido colgados de las colas de caballos
y arrastrados hasta morir. Dice el padre Huc: