A cualquiera le puede pasar, ya sé; pero me hizo gracia, porque he comentado alguna vez que los libreros de los
puestos de usados suelen ser conocedores.
Recién, paseando por parque Rivadavia, encontré en la sección
«Música» de un puestito, entre biografías de Chopin y tratados de armonía, un libro de Richard Bach.
Verdad es que se trata de una errata inocente. Digo
porque podemos imaginar errores más serios:
meter a Bucay en «Espiritualidad»,
el Código Da Vinci en «Historia», Eduardo Galeano en «Sociología», M. Benedetti en «Poesía» y tantos otros
ejemplos…