Acá en Argentina se estrena la semana que viene (aunque la nota no lo dice) la última de Miyazaki, Howl’s moving Castle
(«El increíble castillo vagabundo»).
Esta semana ha resultada nominada al Oscar
(dejando fuera a Madagascar y Chicken Little)
pero no tiene posibilades (dicen todos) frente a Wallace & Grommit y El cadáver de la novia.
Al menos le sirve como publicidad, antes del estreno.
Casi todos dicen, además, que no es lo mejor de Miyazaki.
Diría que coincido, aunque igual me pareció muy buena. Excelente el dibujo,
el diseño de personajes y la animación, pero objetable el desarrollo de la trama.
Como adaptación de la novela, dicen los que leyeron el libro, tampoco es muy afortunada.
La nota de La Nación, con una breve referencia general sobre Miyazaki,
está pasable, aunque tiene algunas inexactitudes: sobre todo,
Nausicaa no fue «una saga de dibujos animados en siete episodios»
sino un «manga» (comic, historieta en papel) en siete (extensos) volúmenes,
sobre la que hizo (no «condensando», sino adaptando un volumen) la película;
que, por otro lado, tiene mayor derecho a ser considerada la primera
obra consumada, mejor que «El castillo de Cagliostro» (cuyo personaje pertenece
a una saga que no le es propia).
De paso, y a modo de curiosidad: la tapa de una vieja edición en video argentina de Nausicaa (en realidad, de «Warriors of the Wind», una versión
abusivamente recortada de Nausicäa).
PS: Unos amigos me avisan que el viernes 10 proyectan esta versión de Nausicaä en el Malba
(tal vez con doblaje en español?). Ojo: es la versión recortada
—y podríamos decir, oficialmente repudiada—, como
puede deducirse de la duración: (84 minutos en lugar de 116).