La maniobras de Charteris : Introducción

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Las maniobras de Charteris (The Maneuvres of Charteris)

Cuento. Publicado por primera vez en Captain, agosto y septiembre de 1903; reimpreso en Tales of St. Austin's y en The Pothunters and Other School Stories.

Traducción: Diego Seguí, 2008.

El estudiante de una public school se mete en líos por muchos motivos: por diversión, por malas influencias, pero también por generosidad, o tal vez sólo por seguir una tradición secular. Charteris lo hace por todo esto pero aun más por principio, por el íntimo deseo de borrar una mácula en su blasón. Sólo que la carga termina haciéndose demasiado pesada.

Este cuento largo, ambientado en St. Austin's, marca tal vez el punto más alto de la técnica de tomar un personaje secundario pero potencialmente interesante y darle un papel protagónico. En los dos años anteriores a publicarse esta historia Charteris había figurado en Los cazadores de cacharros y El Bebé y el Dragón con rasgos sumamente prometedores: ingenioso y de hábitos intelectuales, bueno con el banjo, más amigo de publicar su Luciérnaga que de estudiar; además, "era un bateador seguro y siempre entraba primero con el Once, y jugaba de half en el Quince". Es gárrulo, si se permite la expresión. Lo llaman además "Concejal" (Alderman), "debido a su silueta, más bien rellena, y a su capacidad general para consumir comida".

A Wodehouse le hubiese alcanzado con mucho menos que esto para hacer una historia interesante. Pero se le ocurrió darle una motivación extra en su enfrentamiento con el Director, enfrentamiento que sostiene el extenso cuento hasta su desenlace inesperado. El resto de los estudiantes y profesores son viejos conocidos: Welch, "el Bebé" MacArthur, Tony Graham, Jim Thomson componen con Charteris la pandilla que lleva adelante Los cazadores y algunos otros cuentos. Y también está, por supuesto, el Director, inmortalizado de este modo: "Los años de dedicación a los clásicos habían aguzado su capacidad de descubrir algún sentido allí donde no había ninguno".

Una pequeña contradicción para amantes del detalle: en Los cazadores y en El Bebé Charteris era prefecto de su residencia, pero en Las maniobras se dice que todavía no lo es, y ésa es de hecho una de las causas de su resentimiento. También hay un problema en los participantes de la carrera: se dice primero que antes de empezar había "dos jóvenes flacuchos vestidos de rosa arrebolado" y "un hombre muy alto y delgado"; pero durante la carrera se habla de "el deportista de rosa" por una parte y de "los jóvenes flacuchos" por la otra – quandoque bonus dormitat Homerus.

Hay que observar que la versión traducida aquí es la publicada en Tales of St. Austin's, ligeramente distinta de la aparecida originalmente en Captain. El texto más antiguo puede encontrarse en el sitio de Madame Eulalie, de donde también hemos tomado prestadas las ilustraciones originales de M.R. Whitwell.

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Frontispicio de 'Tales of St. Austin's' (A. & C. Black 1923).

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