Cristina Kirchner dice que no es progresista. Y más: que está en contra del aborto.
Veamos. Lo que dijo es: (..."Las sociedades tienen sus tiempos y yo no creo que la Argentina esté para eso. Apenas si pudimos aprobar una ley de educación sexual y de reproducción responsable y hay que ver lo que costó eso...") ... queda claro.
Contraria al aborto, no porque el aborto sea algo malo en sí, sino porque todavía no son los tiempos; nuestra sociedad todavía es atrasada, no ha progresado lo suficiente; poco a poco iremos progresando, hasta que todos seamos ... progresistas.

Así pues, ella dice "yo no soy progresista" más o menos en el mismo sentido -polémico, hondamente religioso- en que Kierkegaard decía "yo no soy cristiano":

... La distancia entre la Cristiandad (especialmente el Protestantismo de Dinamarca) y el Cristianismo del Nuevo Testamento es tan grande, que debo enfatizar continuamente que yo no me llamo a mí mismo "cristiano". Mi tarea es aclarar el problema, primera condición para tener la posibilidad de hablar de Cristianismo.

S. Kierkegaard - Diarios XI A 206 - 1855

Retóricas aparte, veo que puedo quedarme tranquilo: porque cuando se trata del cuidado de la vida humana, nuestros gobernantes la tienen clarísima:

"No debe haber cosa más injusta e inmoral en una sociedad que una muerte evitable. Por eso, no podemos dejar de poner al cigarrillo en el centro de nuestra atención", dijo a Clarín el ministro de Salud de la Nación, Ginés González García.

 
(Via Gerard - en inglés) Artículo de John Allen que, entre otras cosas, hace una semblanza de los dos teólogos mayores católics post concilio: Urs von Balthasar y Karl Rahner. Así al menos los considera Allen, quien -como el mismo Gerard advierte- se mete con esto en aguas demasiado profundas... Pero a pesar de esto, y aunque poner a estos dos como figuras máximas/representativas/complementarias me suena dudoso, tiene su interés.

 
Lo leí hoy en algún blog de por ahí: es como que [1] estamos jugando un partido contra el diablo. Lo jodido es que él juega de local y nosotros de visitantes.

Y en la cancha de Boca, podríamos agregar [2].

[1 Y quién soy yo para resistirme a escribir "es como que" alguna vez? ]
[2 Para hinchas boquenses suspicaces (y justo hoy...) : Es sólo una analogía, alusiva a la presión que se sufre en esa cancha; no estoy diciendo que Boca sea el demonio ni nada por el estilo... caramba!]

 
Lidia Borda, una voz muy interesante y que vale la pena escuchar (y más en vivo), presenta nuevo disco.

 
Sobre la necesidad y la conveniencia de un sano ejercicio del prejuicio (con perdón de la consonancia) ya dije algo alguna vez.
Lo que me da una módica satsfacción es comprobar que, a medida que pasan los años, uno va afinando la puntería. A veces, incluso, encuentro que mis prejuicios -sobre todo los negativos- se habían quedado cortos. Lo encuentro hoy, por ejemplo, leyendo esto de Aguinis.

...nadie se conmovió por el hecho de que se han cumplido 150 años de nuestra primera, progresista y visionaria Constitución nacional...

...que fue la piedra angular de nuestro despegue hacia un crecimiento en progresión geométrica, alucinante...

...una dirigencia ilustrada que transformó a un país vacío, analfabeto y ensangrentado en uno de los más prósperos del globo...

...Esa pequeña obra condensaba la Sagrada Escritura de nuestra organización colectiva, reunía los mandamientos básicos, respondía al sentimiento diacrónico de generaciones y, en ese momento más que nunca, debía ser el consenso abarcativo de todo el país.

...cincelada con esfuerzo, lucidez y grandeza...

... libros y doctrinas que se analizaban con fervor, a los que se añadió la influencia decisiva de las Bases de Alberdi y la Constitución de los Estados Unidos...

...convirtió en exultante realidad el sueño de los mejores ...

...Empezó un ascenso conmovedor...

... hacia el progreso sostenido. Una pequeña legión de hombres despejados pudo desbrozar las malezas de fijaciones seniles, miedo al cambio y desconfianza del éxito...

...Eran hombres de mundo, de percepción abierta, de sincero amor por la patria ...

... Me refiero a mezquindades caudillescas, voracidad por el poder vacuo, inconsistencia frente a la ley, miedo al progreso genuino, demagogia en lugar de patriotismo, cálculos de corto plazo, ignorancia de las medidas rigurosas y coherentes que llevan al crecimiento...

... Los miembros de la Asamblea coincidían en la urgencia de sacar al país de su atraso mediante una inserción firme, sin rodeos, en el tren de la modernidad, disgustara a quien disgustase...

... a los argentinos, incluso.

 
Un texto de Leon Bloy, a modo de muestra. Es bastante representativo de su estilo:

En este tiempo de ociosos discursos sobre la abolición o la no abolición de la pena de muerte, a la que todos los hombres, desde Adán, están condenados sin conmutación ni recurso de gracia, he escuchado a un predicador que hablaba de no sé ya qué. Ese cura, poco elocuente pero entrenado, se excitó hasta vociferar contra ciertos criminales que aguardaban, desde hacía meses, la ejecución de su sentencia, en aquellos momentos muy cercana. Los trató de «bandidos» indignos de misericordia y manifestó su impaciencia por ver caer sus culpables cabezas.
Eso ocurría en una famosa basílica.

A partir de la palabra bandidos, me fue imposible escuchar más que una voz interior, dominadora, implacable:

—Mira a tus pies, charlatán mecánico sin clarividencia ni caridad. Si todavía puedes, ciego conductor de ciegos, mira el rebaño de canallas que te escucha y que goza con la absolución que les das, injuriando con tu boca a otros canallas más evidentes y menos respetuosos con las leyes del dinero.
Tal vez no seas, tú mismo, un bandido y, sin embargo, mira lo que haces. De esas cabezas que van a cortar y por las que Dios sufrió, al igual que por la tuya, tú prometes, das por adelantado la sangre para que la beban animales feroces.

Mira a esta devota con hocico de cocodrilo cuyas fauces maldicientes han devorado veinte reputaciones; mira a esa penitente con cara de hiena hambrienta, agarrada a todos los confesionarios, fautora de espanto y provocadora de desgracias, que trabaja, durante diez horas al día, para confeccionarse un cilicio con la cuerda del ahorcado; y esa otra devoradora de inocencias y devoradora de eucaristía, que no tiene igual para olfatear los corazones putrefactos. Mira a aquella propietaria, borracha y omnipotente, pero preciosa y sin costura, que se relame pensando en la agonía de los infelices inquilinos que se exterminan a causa de su estómago de buitre hembra. Mira esas hileras de cerdos y tapires, esas papadas, esas crestas, esas carúnculas de comerciantes estimables y recogidos.
Pero sobre todo —¡oh, te lo ruego!— mira a esas vírgenes de burgueses, esas niñas de buena sociedad que aspiran al cielo, cuya blanca alma está llena de cifras y de mercancías que por ahora permanecen en el inventario. Educadas con una meticulosa atención por sus padres alineados e inmóviles tras ellas -como barricas en el depósito de un muelle-, nada tienen que aprender del lado de la pureza ni del lado de la aritmética. Realmente sólo les falta beber sangre, sangre humana de primera clase y eso es, precisamente, lo que tú les das.

¡Ah!, no eres tú uno de esos salvajes apóstoles que dirían a su auditorio:

«Un hombre va a morir por nosotros con la más infame de las muertes.
Ese hombre es un ladrón y un asesino, como todos nosotros. Lo único que nos distingue de él es que él se ha dejado atrapar, al no ser hipócrita y que, luciendo ostensiblemente sus crímenes, es menos abominable. En este sentido expiará por nosotros y porque tengo la misión de enunciarles la Palabra de Dios, se lo advierto a ustedes.
Sé muy bien que este lenguaje los asombra y los indigna. Quisiera que los aterrorizara.
Se creen inocentes porque no le han cortado el cuello a nadie, hasta hoy, quiero creerlo; porque no han roto la puerta de otro ni escalado sus muros para despojarlo; en fin, porque no han transgredido con demasiada evidencia las leyes humanas.
Son tan groseros, tan carnales, que no conciben los crímenes que no pueden verse. Pero te lo digo, querido hermano, tú eres una planta y este asesino es tu flor. En el juicio te lo mostrarán de un modo más que terrible. Sin saberlo y sin quererlo, cada uno de nosotros confía su tesoro de iniquidades e ignominias a un homicida, como un avaro miedoso confía su dinero a un especulador temerario, y, cuando la guillotina funciona, las dos cabezas caen juntas. ¡Todos somos unos decapitados! »

Cierto es que el predicador que así hablara no conservaría por mucho tiempo su púlpito. Es, incluso, difícil imaginar la rapidez con que lo barrerían. Pero aun cuando sólo hablara una vez, habría podido hacer entrar palabras de verdad en oídos hasta entonces herméticamente cerrados por el cerumen untuoso de una clerecía servil, aunque llena de pusilánime jactancia, tan incapaz de despertar a los durmientes como de resucitar a los muertos...

Leon Bloy
La sangre del pobre (cap 9 ; fragmento)

 
Dudaba mucho que algún lector fuera a reconocer aquello del "a petén sen-vén". Y me llegaron cuatro (4) mensajes, de distintos lectores de distintos lugares (siempre de Argentina) y distintas edades que conocían el cantito, casi igual. Una chica (edad y lugar desconocido) me dice que lo aprendió de una amiga toba, y hasta ahora creyó que su extraña fonética derivaba de ese idioma.
Le escribí a mi hermana, pidiéndole su versión, y ella -muy asombrada, después de ... 20 o 25 años- me lo trascribió casi idéntico. Y me manda otras, de las que trascribo algunas que recuerdo vagamente:

Uno do li tuá
de la li-men-tá
osofete colorete
una doli tuá.

A la lata, al latero
a la hija del chocolatero
a la pin, a la pon
a la hija del tío Simón.

Pisa pisuela
color de ciruela
vía vía o este pie (?)
no es de menta ni de rosa
para mi querida esposa
que se llam doña Rosa
y que vive en Men-do-za.

Al botón de la botonera     (o "al bombón de la bombonera")
el que sale o el que queda?
[acá respondía el señalado]
Pin, pon, fuera!

Considerando que algunas se las dictó o recordó mi sobrino de 6 años, parece que a pesar de videojuegos y esas cosas, todavía sobreviven.

 
Tom de Disputations se formula una serie de propósitos de "fin de año" (con la fiesta de Cristo Rey del domingo pasado, termina el año litúrgico; ahora empieza el otro, con el tiempo de Adviento) referidos a su propio blog [*]. Buena estrategia -en general y en particular- a mi ver.

Yo también ando con ganas (o con necesidad) de cambiar algunas cosas por acá. Veremos.

Mientras tanto, no dejen de leer este post del mismo Tom, donde advierte contra la "doctrina Kennedy" en lo que respecta a la influencia de lo católico en la vida pública. Y no se trata sólo de "no transar con el secularismo", sino, también y sobre todo, de no caer en un pietismo protestante:

... A man "whose religious views are his own private affair" is not a Catholic in any meaningful sense. By cutting his faith off from community, he necessarily becomes a non-credal Protestant, since Catholicism is by definition a shared and public affair.

The risk to Catholicism in the U.S. is that, in fighting against secularism, it can make concessions to non-Catholic Christianity -- the traditional Protestantism of the country -- that makes impossible a genuinely Catholic character.

Y este otro, que traduzco:

... mientras el catolicismo va cediendo lugares en el ámbito público, crece la tendencia de muchos católicos a vislumbrar el día -cercano- en que la persecución (digamos: "espiritualmente meritoria") contra los católicos (en particular, y cristianos en general) será la regla en el mundo.

Algunos católicos incluso esperan con ansiedad ese día. Se van corriendo hacia las catacumbas, aún antes de que la cultura decida que es tiempo de meterlos allí.

Pienso que no es una actitud sana.

Si te estás batiendo en retirada, no estás peleando. Y aún cuando la batalla estuviera perdidad, una retirada en masa dejará en manos del enemigo a muchos que no pueden correr tan rápido -que quizás no notaron la ola contraria que se venía, o que son demasiado niños para animarse a correr.

Y pienso que suele darse una visión romántica de las persecuciones de la primer Iglesia. ("Estar vivo en aquella tiniebla era una bendición; pero ser muerto era el mismo cielo").
Algo de eso puede deberse a la idea de que la única manera de que podemos llegar a ser canonizados es a través del martirio; pero también puede haber un confianza falsa en nuestra capacidad para soportar la persecución.
El problema es que nuestra capacidad para soportar la persecución es algo que no existe en este cosmos. Cualquier tal capacidad que podamos tener es un don inmerecido de Dios.

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[* ... el cual, como bien dice Mark, es el blog al que uno quisiera parecerse ... cuando sea grande. ]

 
L.A. County Bans Use Of "Master/Slave" Term.
A mí siempre me había llamado la atención, que con tanta histeria de lenguaje políticamente correcto, nadie hubiera intentado proscribir eso.
Será que se trata de lenguaje técnico, no masivo. Pero todo llega.

 
A ver si ponemos un mínimo de rigor en el uso de las palabras.
A ver si usamos los sustantivos para nombrar lo sustancial, no lo accidental.

Un caramelo está hecho de ... caramelo (azúcar solidificada[*], consistencia vítrea, traslúcida); que vengan sueltos, o apilados en rollos cilíndricos, no cambia la esencia; siguen siendo caramelos.
Por el contrario: pastilla es otra especie de golosina. También basada en azúcar saborizada [*], pero molida y aglutinada; opaca —blanca, generalmente. Comportamiento muy diferente ante el ataque de dientes y lengua. Las DRF, las Punch; esas son pastillas. En la figura, las de la derecha.
Las de la izquierda —repito— no son pastillas.
Qué son ?
Muy bien.
Son caramelos.
Quisiera no tener que repetirlo... Gracias.

[* Como ven, no soy un fundamentalista, no extremo el rigor al punto de usar la palabra azúcar en género masculino, como debería. Creo que la última vez que escuché azúcar en masculino, fue acá... y hace tanto tiempo... ]

 
Menciona acá Robert Spaemann, filósofo alemán, que la eutanasia formaba parte del mundo imaginado por Robert Benson en su novela "El señor del mundo" (que tanto gustaba a Castellani); no me acordaba.

Acá hay una entrevista al mismo Spaemann:

...ya hemos llegado a esto: el pensamiento del dominio de la naturaleza por el hombre se convierte en la idea de la dominación del hombre sobre el hombre hasta llegar a la propia estructura genética. El desarrollo de la razón instrumental, de dominio, lleva además a que el hombre mismo se sienta extraño al mundo. Él mismo constituye una parte de él que será dominada. Pero entonces, ¿quién es el dominador? Es decir, ¿pertenece el soberano a los objetos de dominio?
De este modo, el dominio soberano lo ejercen instancias completamente abstractas como, por ejemplo, la Ciencia, la Técnica, la Sociedad. En un mundo así entendido, naturalmente, no hay espacio para la idea de Dios, pues Dios en modo alguno es algo dominable.
En vez de eso, entiendo por Dios la condición de posibilidad de la libertad humana, y al mismo tiempo la condición de la realidad. El hecho de que el hombre y el mundo puedan pensarse juntos como unidad, como ligados el uno con el otro, como cercanos, sin que el hombre quede subsumido naturalísticamente como un objeto entre objetos, implica en mi opinión la idea de la creación, en la que a la vez somos partes de la naturaleza y también seres racionales que están por encima de ella...

En cuanto al notable experimento de Milgram, está relatado con bastante detalle acá.

 
Una recensión -por un católico- de la "Etica" de Savater.

 

Al ser el mal la raíz del misterio, el dolor es la raíz del conocimiento.

La alegría de la Pascua: no es la alegría que sigue al dolor, la libertad después de las cadenas, la saciedad después del hambre, el reencuentro después de la separación.
Es la alegría que se cierne por encima del dolor, y lo culmina.

El canto lo hace manifiesto, en el gregoriano (Salve festa dies...).
El dolor y la alegría en armonía perfecta.

El dolor es lo contrario de la alegría, pero la alegría no es lo contrario del dolor.

Simone Weil (anotaciones de sus "Cuadernos")