Y entran en Cafarnaúm; y luego entrando los sábados en la Sinagoga, los enseñaba. Y se pasmaban de su doctrina, porque los enseñaba como teniendo potestad, y no como los escribas. (vv. 21-22)
San Jerónimo
Al redactar San Marcos el texto de su Evangelio, no siguió el orden de la historia, pero guardó el de los misterios. De aquí que refiera como primero la santificación de los sábados diciendo: "Y entran en Cafarnaúm".
Teof
Cuando se reunían el sábado los escribas, entró a enseñar en la sinagoga. Por lo cual sigue: "Y entrando los sábados en la sinagoga les enseñaba". La ley mandaba celebrar el sábado reuniéndose todos para consagrarse a la lectura. Cristo enseñaba argumentando, no adulando como los fariseos. Y continúa: "Y se admiraban de su doctrina, porque los enseñaba como teniendo potestad, y no como los escribas". Enseñaba con potestad, convirtiendo a los hombres al bien y advirtiendo con penas a los que no creían.
Beda
Los escribas enseñaban también a los pueblos lo que está escrito en Moisés y los Profetas. Pero Jesús, como Dios y Señor del mismo Moisés, con la libertad de su voluntad añadía a la ley lo que le parecía que le faltaba, o variándola predicaba al pueblo, según leemos en San Mateo ( Mt 5,21-44): "Se dijo a los antiguos; pero yo os digo".