Y tomó Jesús aparte a los doce, y les dijo: "Mirad, vamos a Jerusalén y serán cumplidas todas las cosas que escribieron los profetas, del Hijo del hombre. Porque será entregado a los gentiles, y será escarnecido, y azotado, y escupido. Y después que le azotaren le quitarán la vida, y resucitará al tercer día. Mas ellos no entendieron nada de esto, y esta palabra les era escondida y no entendían lo que les decía". (vv. 31-34)
San Gregorio, in Evang hom. 2
Previendo el Salvador que su pasión turbaría el espíritu de sus apóstoles, les había predicho mucho tiempo antes lo que había de sufrir en la pasión y la gloria de su resurrección. Por esto sigue: "Y tomó Jesús aparte a los doce y les dijo: Mirad, vamos a Jerusalén", etc.
Beda
Previendo que habían de decir algunos herejes que Jesucristo había enseñado doctrinas contrarias a la ley y a los profetas, manifiesta que por los oráculos de los profetas se había anunciado la consumación de su pasión y celebrado el triunfo de su gloria posterior.
Crisóstomo In Matthaeum hom. 66
Habla con sus discípulos aparte, acerca de su pasión, porque no convenía que todos tuviesen conocimiento de ello, para que no se turbasen. Pero se lo predecía a sus discípulos para que, animados con esta esperanza, se sostuviesen firmes con más facilidad.
San Cirilo
Y para que sepan que conocía de antemano su pasión y que iba espontáneamente a ella, con el fin de que no pudiesen decir: ¿Cómo ha caído en manos de sus enemigos el que prometía salvarnos? Por esto les refiere gradualmente todo el orden de su pasión, añadiendo: "Porque será entregado a los gentiles y será escarnecido, azotado y escupido".
Crisóstomo
Esto lo había predicho ya Isaías, diciendo ( Is 50,6): "He ofrecido mis espaldas a los azotes, mis mejillas a las bofetadas y no he apartado mi cara de las inmundicias de los esputos". Y aun el profeta predijo el suplicio de la cruz con estas palabras ( Is 53,12): "Entregó su vida a la muerte y fue considerado entre los inicuos". Por esto añade: "Y después que le azotasen, le quitarán la vida". Pero David también había predicho su resurrección, diciendo ( Sal 15,10): "No dejarás mi alma en el abismo". Por lo que añade: "Y resucitará al tercer día".
San Isidoro
Yo me sorprendo de la demencia de los que preguntan por qué Jesucristo resucitó antes del tercer día. Si hubiese resucitado después de lo que había dicho, hubiese demostrado falta de poder. Pero resucitando antes da a conocer su omnipotencia. Si alguna vez sucede que un deudor ofrece pagar a su acreedor en el término de tres días y vemos que le paga en el mismo día, no lo consideraremos como falso, sino más bien como verídico. Diré también que el Señor no había dicho que resucitaría después del tercer día, sino en el tercer día. Tenemos la víspera del sábado, el sábado hasta la puesta del sol y el día siguiente al sábado, que fue cuando resucitó.
San Cirilo
Los discípulos, sin embargo, no conocían aún de manera detallada lo que habían predicho los profetas, pero después que resucitó les dio a conocer el verdadero sentido, para que comprendiesen las Escrituras. Por esto sigue: "Mas ellos nada de esto entendieron".
Beda
Y por lo mismo que los discípulos deseaban principalmente la vida del Salvador, no podían comprender su muerte. Además, como no sólo sabían que era un hombre inocente, sino también verdadero Dios, no creían de ningún modo que podría morir. Y porque muchas veces había sucedido que lo habían oído hablar por parábolas, creían que todo lo que decía acerca de su pasión debía referirse en sentido alegórico a alguna otra cosa. Por esto sigue: "Y esta palabra les era escondida y no entendían lo que les decía". Pero los judíos, como conspiraban contra su vida, comprendían que se refería a su pasión cuando por medio de San Juan decía ( Jn 3,14): "Conviene que el Hijo del hombre sea levantado". Por esto dijeron: "Nosotros sabemos por la ley que Cristo permanece eternamente; ¿cómo dices tú que el Hijo del hombre conviene que sea levantado?".