Los buenos lugares

Me pregunto si aquella prevención contra el afán de procurarse los mejores asientos en el banquete (el lugar más honorable; y por lo mismo, el lugar que procura las vecindades más gratificantes; el lugar donde se lo pasa bien) no podría aplicársela la cristiandad (o la Iglesia) a sí misma.
Y acaso también aquel dicho de «quien quiera salvar su vida la perderá»; y tantos otros…

Deja un comentario

Para comentar en el blog hay que autenticarse con cuenta de Google (Gmail), Twitter, Facebook, Windows Live (Hotmail) (o Disqus, o wordpress.com). También recibo comentarios por mail, a hjg.com.ar@gmail.com.